La tortuga de poca edad, cuenta con cuatro patas, un caparazón y una cola, sin embargo se trata de un ejemplar con una bicefalia única, algo que por otra parte es más común en reptiles que en mamíferos.
Ciudad de México, 20 de octubre (ASMéxico/SinEmbargo).- Frank Cuesta, además de en sus programas en televisión, se ha trabajado su propia audiencia a través de Youtube. Allí cuenta el día a día de su asociación y los animales que recupera y rescata, como el búho Mariano, al que crió y después enseñó a odiar a los humanos para que no lo volvieran a cazar para el tráfico ilegal.
En su último vídeo, Cuesta enseña el que para él es el animal más extraño que ha visto en su vida: una tortuga de dos cabezas. El animal, aún de muy poca edad, cuenta con cuatro patas, un caparazón y una cola. Es decir, se trata de un ejemplar con una bicefalia única, algo que por otra parte es más común en reptiles que en mamíferos.
Los animales con bicefalia tienen el mismo origen que los siameses humanos: dos gemelos separados que en un estado embrionario acaban uniéndose. Cuesta comenta en el vídeo que se llevará al animal al refugio para cuidarlo y cuando pasen unos meses hacerle una radiografía para ver qué órganos y huesos comparten.
Este tipo de animales no tienen muchas opciones de sobrevivir en la naturaleza. La existencia de dos cerebros complica su labor a la hora de moverse y mandar decisiones al cuerpo. “Veremos cómo se apañan para andar y comer estas dos”, dice el divulgador. A las dos tortugas (¿por qué se puede hablar de dos animales al tener dos cabezas?) Cuesta las ha llamado Pe y Pa. Es decir, Pepa.